El presidente Donald Trump emitió una orden ejecutiva con la finalidad de impulsar la minería en aguas profundas, para incrementar el acceso de Estados Unidos a minerales esenciales como manganeso, níquel y cobre, ampliamente usados en diversas industrias.
La orden, firmada el jueves 24 de abril en una reunión privada, pretende potenciar la explotación minera tanto en aguas bajo jurisdicción estadounidense como en aguas internacionales.
Se calcula que el Pacífico y otros mares contienen abundantes formaciones rocosas denominadas nódulos polimetálicos, las cuales contienen minerales clave para fabricar vehículos eléctricos y dispositivos electrónicos.
“Estados Unidos tiene un interés fundamental de seguridad nacional y económico en mantener el liderazgo en ciencia y tecnología de aguas profundas y en recursos minerales del fondo marino”, se lee en la orden ejecutiva.
¿Qué significa la medida en la práctica?
La medida de Trump busca acelerar la concesión de permisos mineros según la Ley de Recursos Minerales Duros de los Fondos Marinos Profundos de 1980, y establecer un procedimiento para otorgar licencias en la Plataforma Continental Exterior estadounidense
También ordena una revisión acelerada de los permisos para actividades mineras en fondos marinos internacionales.
La advertencia de las organizaciones
Marce Gutiérrez-Graudiņš, fundadora y directora ejecutiva de la ONG Azul, advirtió que la orden ejecutiva evade acuerdos internacionales e ignora la voluntad de la población de proteger los océanos.
La activista recordó que, según la Encuesta Nacional de Azul de 2024, el 84% de los votantes latinos respalda que el gobierno implemente protecciones más fuertes para los océanos, aunque impliquen mayores costos. Además, indicó que el 78% prefiere proteger el mar aun cuando ello implique prohibir la extracción de minerales submarinos.
Destacó que la minería de recursos submarinos pone en peligro la vida dentro y fuera del agua.
“Instamos a nuestros líderes a que escuchen a las comunidades que piden al gobierno que invierta en nuestro planeta azul, en lugar de explotarlo”, añadió.
https://twitter.com/AzulDotOrg/status/1915548198111707273
Arlo Hemphill, líder de Greenpeace para la protección de los océanos, también rechazó la extracción minera en aguas profundas. Según recogió Reuters, argumentó que el gobierno no tiene derecho a autorizar unilateralmente la destrucción de los fondos marinos en beneficio de algunas corporaciones
Implicación internacional
La orden ejecutiva de Trump posiblemente genere tensiones internacionales. El mandatario intenta contrarrestar el dominio que ejerce China en este sector.
Por otra parte, Estados Unidos no ha ratificado la Convención sobre el Derecho del Mar de Naciones Unidas. Mientras tanto, la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos, entidad surgida de dicha convención, lleva años debatiendo regulaciones para la minería marina, sin lograr acuerdos definitivos.